Cada pieza de la colección de BERML está meticulosamente elaborada a mano en acero inoxidable, lo que garantiza una composición libre de plomo y cromo y propiedades hipoalergénicas que recuerdan a los metales preciosos. Con su notable durabilidad y fácil mantenimiento, el acero inoxidable es el material ideal para elaborar joyas exquisitas, disponible en varios acabados impresionantes, incluidos cepillado, grabado, mate y brillante.
Pero la cosa no termina ahí. Nuestros colores metálicos son una cautivadora variedad de oro, plata, negro y oro rosa, que se logran mediante un proceso IP (revestimiento iónico) conocido como deposición física de vapor (PVD). Esta técnica de vanguardia otorga a nuestras joyas una durabilidad incomparable, superando los métodos tradicionales entre cinco y ocho veces, utilizando menos material, lo que en última instancia resulta en precios más accesibles y asequibles.